Arcadia a veces

Juan J. Prieto L.*En Arcadia no hay mar, solo una playa a muchos kilómetros de distancia, y allí no hay botes ni alcatraces que alboroten esa atmósfera de fiel apego a la tranquilidad. Alguna vez construyeron un rompeolas que más bien parece el espinazo de un pez que poco a poco se va secando en […]